Jim Ramos Ñañez
El titiritero ha
huido
y ya ni vuelve;
sus falsos
reinos prometidos
son estos
espacios instantáneos
en donde nos
movemos.
Allí
representamos el drama o la comedia
Según se nos
exija.
No estás en
ninguna otra parte,
estás aquí,
habitando tu propia muerta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Escribe tu comentario aquí.